Película basada en la novela del querido Isaac Rosa y dirigida por David Macián. Se trata de un proyecto cooperativo y transformador que debería ser obligatoria para los circuitos de Economía Social, Solidaria y Transformadora.
Película muy valiente y atrevida en formato, temática, financiación y puesta en escena. Algo nuevo en este mundo del cine que fabrica sueños a mayor gloria del capitalismo patriarcal y el consumismo.
Trata sobre la inutilidad del trabajo físico, que se exhibe como como obra de teatro o de circo, como algo que ya no vale, y que hay que recordar como algo anecdótico de otros tiempos. El trabajo como espectáculo dada su banalidad y sinsentido.
Un grupo de trabajadorxs manuales o básicos es contratado para hacer su trabajo de manera inútil delante de un previsible público. Una especie de café teatro, donde hacen y deshacen su trabajo continuamente. No sabemos de los diferentes trabajos es más estúpido, cuando no hay un fin previsto y determinado para ese trabajo, sólo trabajo anónimo y sin finalidad de creación de riqueza ni de transformación social.
La película nos pone delante de la cuestión de la dignidad del trabajo o de su sentido. y ahí surge la idea de que ¿todo vale si lo pagan bien? Es decir, cuando «la mano invisible» del mercado manda y ordena nuestras vidas.