El rescate de las autopistas es algo aberrante. Una aberración que no generará ningún problema político, social, ni incluso económico (para eso sí hay dinero).
La derecha genera ideas. Ideas que sirven para que una minoría se apropie de la riqueza y aumente la desigualdad. FAES, una fundación que impulsó Aznar es un ejemplo de herramienta para la generación de esta munición que legitima aberraciones. Desde estos «Tanques de Ideas» hablan de libertad, de la necesidad de que el Estado no intervenga en la economía. Son liberales. Liberales que piensan y producen ideas para que se liberalicen los negocios con ganancias y se nacionalicen los que tienen pérdidas. En esto consiste básicamente el neoliberalismo: un pensamiento útil para que el poder continúe apropiándose de una cada vez mayor proporción de la riqueza social. Ejemplos de actuaciones concretas son el rescate estatal de la banca o de las autopistas (en gran medida otra vez de la banca).
Ellos cumplen con su cometido, trabajan y piensan, generan ideas para sus intereses. Esto es lo normal. Y como normal no es un problema.
En mi opinión el problema es la falta de capacidad de las ideas transformadoras, de las propuestas de las fuerzas que desean una sociedad más justa e igualitaria. El verdadero problema es la negación de esta cuestión; el no considerar prioritario avanzar en el frente ideológico para generar ideas fuertes que supongan una verdadera alternativa al capitalismo neoliberal imperante.
El problema es no ver un problema en nuestra debilidad en el frente de las ideas, alternativas, pensamiento.
Categorías