Como soy políticamente correcto hago una llamada a la participación política. Y claro, condeno la violencia (de los otros).
Y también opino que, tras el teatro, en el que será «democráticamente» elegido el que previamente ha sido autoritariamente impuesto, llegará otro período económicamente convulso. Y ya se sabe que «a economía revuelta, ganancia de especuladores».
Los mismos que en política no especulan, imponen (con o sin violencia, según), mientras los demás somos llamados en partipar en sus urnas. El uso de otras te pueden llevar a la cárcel (pacíficamente, claro).